Sudamerican Rockers

Julio Escalante

Hace algunos días atrás Chilevision lanzo una serie inspirada en El grupo chileno Los Prisioneros llamada "Sudamerican Rockers" y hoy hablaremos de esta serie chilena que esta filete y si no la han visto dejen de hacer cualquier cosa que estén haciendo y vaya a verla al tiro por que hace tiempo que no veía algo tan bien hecho en la tele.

Quizás en los noventa (década en la que vuestro servidor creció) era un crimen no saber quiénes eran Los Prisioneros, era imposible no conocerlos cuando era seguro que algún compañero tenía el disco Corazones en cassette y lo llevaba para las convivencias de fin de año y el curso se transformaba en la empresa más grande de piratería jamás vista, todos grabando en los cassettes que nos daban con el libro de inglés.
 Bueno pero estamos para hablar de la serie inspirada en Los Prisioneros, trio musical formado por Jorge Gonzalez (voz/bajo), Claudio Narea (guitarra/coros) y Miguel Tapia (batería/coros). Siempre se supo del origen humilde de Los Prisioneros, conjunto formado en San Miguel, amigos del liceo que deciden formar una banda y que como (me atrevo a decir) al 1% de estas bandas de liceo, les funciono, sobre todo esto se trata la serie.
  
Usted debe decir: "¿Ya y...?",  ¿Qué hace tan “filete” la serie? Yo le respondo “¡Todo!”.
Así es, todo en la serie está magistralmente hecho...si bien tiene algunos “pero” que veremos más adelante no opaca todo lo bueno que tiene.

Partamos por los personajes principales. Si bien el parecido físico no es tanto, que es lo primero que alguien más superficial va a notar, las actuaciones son geniales, uno se olvida que tienen que parecerse y no me refiero a que las actuaciones sean parecidas a Los Prisioneros liceanos porque yo no los conocí en esa época (no soy tan viejo). Me refiero a que los cabros actúan como liceanos que perfectamente podrían haber sido compañeros nuestros. Las mismas tallas fomes que uno le tiraba a los compañeros, las movidas para engrupirse minas todo es muy creíble y divertido.

Los personajes secundarios también están bacanes y pasa lo mismo que con los protagonistas, son personajes con los que uno empatíza de inmediato, por ejemplo el papá de Jorge. Todos tuvimos o tenemos un amigo que tiene un papá ultra buena onda que lo apoya en todo y que es bueno para la talla, o la mamá que es más seria y cascarrabias, igualita a mi mamá (te amo mami).

Otra cosa que  me gusto de la serie es el uso del lenguaje, se nota que hay investigación en cuanto a los términos usados en ese tiempo pero lo que agradezco mas es que nadie tiene ese tonito molesto, fome y arribista que tienen en general las series chilenas, tratando de hablar bien con las “s” bien marcadas, siendo que aun a mis titantos años no he conocido a nadie que hable así de bien (quizás exagero pero reconozcamos que así es el asunto). Otro punto importante es que ya no estamos viendo algo de plaza Italia para arriba. No es de resentido pero ¿Por qué esa fascinación de los productores de siempre hacer novelas o series de plaza Italia para arriba? Si el 10% de la población de Chile tiene plata y el resto, como diría Harry Potter somos simples muggles o sangre sucia. No entiendo, ojala algún día alguien me lo explique y así podre morir en paz.

Y el último punto es la banda sonora. Jorge Gonzalez vendió algunos derechos de canciones a la serie y eso se nota, lamentablemente para mal. Se abusa de la canción paramar, usándola para lo que se imagine, no me extrañaría si en un capitulo posterior se usa cuando alguno de los personajes este en el wáter. Se agradece eso si el uso de Sandro o de The Clash, que realmente me sorprendió.
Si bien Claudio Narea, guitarrista de la banda, basureó la serie diciendo que no era real y que un minimo de lo que se contaba ahí era verdad. Hay que decir que es una serie de ficción como le declaro el productor de esta, es imposible contar una historia 100% fiel a la realidad sería demasiado fome para eso se contratan guionistas.

Bueno en definitiva la serie esta buenísima no dejen de verla, no se van a arrepentir, buenos personajes, tallas con las que uno se mata de la risa, y personajes que son super locales y mas cercanos a la realidad, a diferencia del resto de las series con las que compite.

Espero que esta sea la primera de muchas series en este estilo y cuando digo estilo me refiero al trabajo que se puso tras esta serie el cual se hace notar en los aspectos técnicos y dramáticos. Y lo que me gusto mas que el manjar colun fue que se te olvida que lo que estas viendo es una serie de Los Prisioneros, al principio te llama la atención verla por esto pero a medida que se desarrolla la historia se sostiene fácilmente sin acudir a ser nombrada como la serie “de” o la seria basada “en” perfectamente se podría haber hecho sin el nombre ni las alusiones a los prisioneros y estaría igual de bacán, quizás ahí Narea no se hubiera enojado.
Sea cortés, ande con cuidado, edúquese lo más que pueda, respete para que lo respeten...¡Y que Dios nos ampare!